APRENDE A LLEVAR EL CONTROL DE TU OBRA DE CONSTRUCCIÓN

Tener el control total de una obra significa que todo el proceso de ejecución se realice sin ningún contratiempo y se logre entregar según lo pactado.  En este sentido, es importante que se optimicen todas las acciones y los trabajos de construcción.

Para esto, es necesario que haya plazos por cada etapa del proyecto y equipos encargados en desarrollar tareas específicas.

Por otro lado, como parte principal del control de una obra, se debe realizar un presupuesto completo que permita integrar la ejecución con el avance técnico del proyecto, esto proporcionará un proceso más rentable y productivo.

Siempre se debe tener en cuenta que el presupuesto es una herramienta de control que puede variar y ser modificado. Por eso, es imprescindible la supervisión y la programación de los gastos mediante una logística adecuada que pueda atender todos los requerimientos necesarios en el desarrollo constructivo.

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En este sentido, contar con una planeación y un cronograma ayudará a identificar todos los detalles indispensables para el inicio y final de cada etapa del proyecto.

pero ¿Qué se necesita para esto?

1. Revisar los planos
2. Analizar si requerimos de proveedor o contratista
3. Si necesitamos realizar alguna cotización detallada de material o trabajo
4. Realizar procesos de contratación
5. Comprar materiales y adquirir equipamientos
6. Trámites y documentaciones legales

Tener estos aspectos bien ajustados facilita que nuestra obra tenga un progreso óptimo en tiempo y forma. Además, un control permite actuar a tiempo frente a los imprevistos que se puedan presentar generando soluciones más eficientes.

Recuerda que más allá de tomar decisiones es fundamental estar al tanto de los progresos y necesidades de nuestra obra.

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